El regreso de la nutria al Almonázar

José G. Guerra
José G. Guerra

Socio fundador de Linde Verde en 2015. Máster en Restauración de Ecosistemas por la Universidad de Alcalá. En la actualidad desarrolla su trabajo como investigador en el campo de la agroecología.

El declive de las poblaciones de nutria en el siglo XX

A principios del siglo XX, seguramente a ningún lugareño le habría sorprendido encontrarse con una nutria (Lutra lutra) en el arroyo Almonázar, un pequeño afluente del Guadalquivir que atraviesa el término municipal de La Rinconada.

Fig.1. Ejemplar de nutria (Lutra lutra) Fuente: Mark Hamblin

El arroyo Almonázar, albergaba en su entorno no sólo a la nutria, sino también a otras especies de gran importancia ecológica y económica como la anguila (Anguilla anguilla) o el esturión (Acipenser sturio). Pero el desarrollo urbano descontrolado, con vertidos sin depurar a sus aguas, unido a la intensificación de la agricultura y el uso indiscriminado de agroquímicos, fueron degradando las aguas de este arroyo hasta convertirlo en alguno de sus tramos en un simple canal de desagüe, conllevando la desaparición de muchas de las especies emblemáticas que lo habitaban.

Fig.2. Evolución de la población de nutria en Andalucía

La nutria no desapareció únicamente del Almonázar. Su población había experimentado un descenso alarmante en toda la Península Ibérica, lo que conllevó su inclusión como especie vulnerable en el Libro Rojo de los Vertebrados Españoles publicado por ICONA en 1992. En las provincias de Sevilla y Córdoba se vio relegada a algunos tramos fluviales de la sierra, en los que resistió durante los peores momentos para la especie.

Sin embargo, en los últimos años sus poblaciones han experimentado una clara expansión[1] (Fig.2), en buena parte ligada, curiosamente, a la presencia masiva del cangrejo americano en el Valle del Guadalquivir[2], que ha desplazado al cangrejo autóctono y que constituye junto con diferentes especies de peces la base fundamental de la nutria en nuestras latitudes[3].

El rastro de la nutria en el Almonázar

Fig.3. Restos de nutria en el Almonázar. Fuente: LindeVerde


En los últimos dos años habíamos escuchado relatos de vecinos de La Rinconada que aseguraban haber visto lo que parecían nutrias en puntos concretos del arroyo Almonázar, pero no fue hasta el muestreo realizado durante el programa Andarríos por nuestra organización en 2018, cuando pudimos por fin localizar y confirmar la presencia de rastros de nutria en el Almonázar. La nutria suele utilizar elementos sobresalientes en el cauce de los ríos que habitan, para depositar sus excrementos y marcar de esta forma el territorio. Dichos excrementos tienen un aspecto muy característico, en el que se suelen apreciar fácilmente restos de cangrejo (Fig.3)


[1] López-Martín, J.M. y J. Jiménez (eds.) (2008). La nutria en España. Veinte años de un mamífero amenazado. SECEM, Málaga.

[2] Ruiz-Olmo, J; Clavero, M. Los cangrejos en la ecología y recuperación de la nutria en la Península Ibérica http://hdl.handle.net/10261/46575

[3] Ruiz-Olmo. J. y J. Jimémez (2008). Ecología de la nutria en los ambientes mediterráneos de la Península Ibérica. Pp: 305-343. En: J. M. López-Martín y J. Jiménez (eds.). La nutria en España. Veinte años de seguimiento de un mamífero amenazado. SECEM, Málaga.

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